viernes, 26 de julio de 2024

AVISOS EN LOS RUEDOS 

 

                              Madrid, 25-08-2024

                              (Lectura rápida 😊)

 

También me publican en La Hora Digital

https://www.lahoradigital.com/carlos-miranda/autor/1931


 


Cuando Mariano Rajoy se entendía con el PNV intercambiaba frases simpáticas con su líder en el Congreso, Aitor Esteban. En EEUU, hace poco, los demócratas tenían perdida toda esperanza con Biden, buen Presidente, pero, ahora, mal candidato. 

Lo primero fue antes de la puñalada trapera que los nacionalistas/separatistas le dieron la semana siguiente de votarle los presupuestos en mayo de 2018 para dar paso a Sánchez apoyando su moción de censura. Estimaron que el socialista estaría en una posición más débil que el gallego, siendo así presa más fácil de los chantajes periféricos.

Se agradecen las intervenciones en el Congreso educadas y con un humor aceptable para todos y no la polarización del sanchismo levantando muros contra la derecha acusándola de marca blanca de la extrema derecha, como si no lo fuera el sanchismo de la extrema izquierda, separatistas y sucesores de ETA. Se puede recordar por ejemplo con nostalgia un intercambio en el Congreso entre Rajoy y Esteban en el que tras una chanza del vasco el gallego respondió diciéndole “Si quieres grano Aitor, te dejaré mi tractor”, provocando risas incluso por parte del nuevo tractorista.

Ese mismo que el otro día cantó a Sánchez unas cuarenta en el Congreso, cuando el Presidente del Gobierno exponía sus intenciones de “regenerar” los medios de comunicación como reacción a la censura que en muchos hay por ciertas actividades que consideran impropias de su esposa, Begoña Gómez.

Esteban dijo: “Señor presidente, le voy a ser muy sincero, a mí lo que me sorprende es que nadie diga que hay cosas simplemente que no se deben hacer, no porque las prohíba la ley, sino que no se deben hacer; que nadie hable de ética y estética en vez de ordenamiento jurídico". Luego añadió: “hay límites más allá de lo legal".

Ojalá la conducta de Gómez no sea penalmente condenable por lo bochornoso que sería para todos los españoles, no sólo para la pareja Sánchez-Gómez, el Gobierno que les respalda y el PSOE. Esteban ha clavado un rejón importante al inferir el vasco que a la mujer del César se le han caído los velos de una deseable discreción que no es incompatible con la dedicación profesional de cualquier cónyuge o familiar de alguien que ejerce un cargo, y eso también avergüenza.

¿Tanto como para que Sánchez ceda su puesto a otro de su partido? Hay opiniones para diferentes gustos. Sánchez respalda a su esposa, responsabilizándose, pues, de su comportamiento. En su partido se ponen de perfil, pero les afecta, aunque sólo sea por haberla visto celebrar en un estrado especial en Ferraz la derrota dulce del PSOE de hace un año junto a su marido, Cristina Narbona, M.J. Montero y Santos Cerdán -la cúpula sanchista- porque estimaban que sumaban más. Con malas compañías, evidentemente. 

En el Reino Unido hay una unidad administrativa, como recordaba recientemente la abogada española Miriam Gonzalez Durántez, esposa de Nick Clegg que fue Viceprimer Ministro británico con Cameron, que aconseja a los cónyuges de cargos políticos para que puedan alejarse de minas peligrosas para ellos y sus parejas (si cae uno, caen los dos salvo divorcio). Aquí debiera bastar el sentido común, como también le dijo Esteban a Sánchez. 

En los EEUU, Biden renunció a la reelección. Respalda a su Vicepresidenta Kamala Harris: mujer, multiracial, 59 años, antigua Senadora por California donde fue Fiscal General. La critican por sus años discretos con Biden. Es el rancho de los Vicepresidentes que están esencialmente solo para sustituir al Presidente (Truman, Johnson, Ford).

Con Kamala, ya dueña de su propio destino político, es un nuevo partido contra Trump que es quien está ahora a la defensiva. Harris es la joven y Trump el viejo. Un villano condenado, un mujeriego abusador, un indeseable. Kamala puede haber anulado ya en pocos días la desventaja en intención de voto. Adelantará a Trump. Queda que gane los “Estados bisagra” que determinarán el resultado en el Colegio Electoral que es el que elige al Presidente. El debate en septiembre con Trump puede ser determinante. Kamala es aire fresco y hasta puede ser un vendaval salvador para el partido demócrata y sus candidatos para el Senado y la Cámara de Representantes.

 

Carlos Miranda, Embajador de España

 

 

viernes, 19 de julio de 2024

ENTRE BULA Y BUROFAX

ENTRE BULA Y BUROFAX

 

                            Hendaya, 19-07-2024

                       (Lectura bastante rápida 😊)

 

 

También me publican en La Hora Digital

https://www.lahoradigital.com/carlos-miranda/autor/1931

 

 


Las últimas excomuniones han sido las de una decena de monjas clarisas del convento de Belorado (Burgos) tras haber enviado un burofax rechazando presentarse ante un tribunal eclesiástico. ¡Qué rica es la diversidad!

 

La Iglesia dice ser una, pero son muchas. Las clarisas rebeldes reafirman su Fe en Cristo y siguen declarándose católicas, pero ya no reconocen la autoridad de Francisco. No se sabe bien por qué. No parece que le censuren por oponerse a las “mariconadas” en los seminarios (!) o por decir que las mujeres son las que cotillean y que los hombres deben llevar los pantalones ….

 

Las clarisas de Belorado son también ahora “hermanas separadas” por un problema acuciante como el de la vivienda, sobre todo las sociales, desatendido por nuestros gobiernos, progres o no. El lío parece provocado por unas compraventas de conventos. Que si no les abonan uno que vendieron y no pueden pagar otro adquirido por la negativa, parecería, del obispado burgalés a sancionar sus cambios de residencia.

 

¿Cómo compran y venden bienes que son de la Iglesia? ¿Son propietarias o son okupas? Las monjas, monjes y curas harán voto de pobreza, pero la Iglesia es propietaria de una ingente cartera de bienes inmobiliarios altamente valorados que pueden acabar siendo objeto de comercio al ritmo, quizás, de una concupiscencia satánica.

 

Veremos como acaba este cisma más modesto que el del Palmar de Troya. Las clarisas se apoyaron en un obispo residente en Bilbao, falso según la Iglesia, pero legítimo según el interesado, servido en piso de lujo por un mayordomo y una criada con delantal y cofia, según la canallesca. Consagrado por un prelado díscolo que ahora reniega de él y apoyado por un “cura coctelero”. Una falta de caridad que no sorprende en los medios escandalosos. Este cura (o no) servía antes copas detrás de una barra agitando una coctelera. ¿Y qué? San Agustín llevó primero una vida alejada de Cristo antes de santificarse.

 

¿Alguien piensa que las clarisas excomulgadas no serán acogidas a la diestra de Dios? ¿Por negar con un burofax la autoridad de un obispo terrenal? Si lográramos separarnos de las riquezas de la Iglesia nos acercaríamos al Reinado de Dios en la Tierra que es la aspiración bíblica de los judíos y que los terroristas palestinos desean impedir.

 

En Luisiana y otros lugares de EEUU quieren que se exhiban en las escuelas los Díez Mandamientos. Ello, argumentan los que se oponen, viola la separación del Estado y de la Iglesia. Que vengan a España a ver como gracias al Concordato el Estado español se mezcla con la iglesia incluso cuando gobiernan progres populistas. Si todos los seres humanos tuviesen en su bolsillo los Díez Mandamientos viviríamos en un mundo mejor porque, aunque atribuidos a Moisés por mandato divino, son tan humanos que hasta ateos y agnósticos pueden cumplirlos y subir al cielo (como admite el propio Francisco) donde las guerras de religión no se estilan ya que Dios solo hay uno.

 

También subirá en su momento al cielo el católico Biden a pesar de apoyar el aborto. No parece que vayan a excomulgarle. No hay, pues, igualdad de trato. Será más poderoso que las clarisas, pero estas se sentirán discriminadas. Además, Biden aceptaría marcharse si baja a pedírselo el Altísimo, pero no viene añade irrespetuosamente. Ahora dice que con una enfermedad grave se marcharía. Pues ya pilló el COVID y los republicanos atribuyen a una intervención divina el que la bala asesina sólo rozase la oreja de Trump. ¿Necesita Biden más señales?

 

Al ser excomulgadas las clarisas ya no serán subvencionadas por el Estado como la Iglesia. Claro que, como dice Ayuso, ya pagan los madrileños (y otros) con sus impuestos las embajadas secesionistas catalanas por lo que la madrileña odiada por la izquierda dice que son los catalanes los que roban a los españoles. No hace falta ser del PP o “fan” de Ayuso para reconocer que algo de razón no le falta. Lo de Milei es otra historia. Como la “inquina” del Juez Peinado con Begoña Gómez. ¡Vaya por Dios! Podrían ahorrarnos al menos los impuestos que malgastan los separatistas.

 

Ya ven hasta donde nos llevan unas clarisas díscolas. ¡Unas santas! Nos permiten salir de la uniformidad del pensamiento único. Nos traen aire fresco además de cocinar unas trufas riquísimas y todo eso con la extrema derecha y la extrema izquierda extendiéndose por Francia con votos terrenales, democráticos y diabólicos.

 

Mientras tanto, amparados en la “vía sinodal” de Francisco, una forma de autonomía en la Iglesia concedida por el Papa para equilibrar en su seno las Iglesias occidentales y las tercermundistas generalmente más conservadoras, sobre todo frente a la “revolución sexual” occidental, unos católicos alemanes se elevan contra la Iglesia romana que consideran excesivamente conservadora y que abusa, añaden, de los menores. Por cierto, la Iglesia española está aprobando un plan de indemnizaciones por abusos al que se opone Bolaños por no pactarlo con el gobierno.

 

¡Que Dios coja confesados a los suyos! A las clarisas excomulgadas y a los que con sus imprudencias separatistas o de extrema izquierda llaman inconsciente, pero estúpidamente, a las huestes de Le Pen o de Abascal, incluso a Alvise, como hacen los progres que les promocionan para asustarnos hasta de Feijóo que poco tiene que ver con ellos.

 

Oscar Puente, intelectual indispensable en la Moncloa, asegura que el PP es la marca blanca de Vox. Eso sí que es ver la paja en ojo ajeno cuando el sanchismo es la marca blanca de la extrema izquierda, de los separatistas y de los herederos de ETA. Recen, recen, que hasta los marineros que suelen hacerse eso en Dios le suplican cuando llega la tormenta. Sigue la borrasca sanchista encima y se avecina Trump, el loco de la motosierra de Washington.

 

 

Carlos Miranda, Embajador de España

 

 

jueves, 11 de julio de 2024

REALIDADES Y APARIENCIAS

REALIDADES Y APARIENCIAS

 

                              Madrid, 12-07-2024

                                (Lectura fácil 😊)

 

También me publican en La Hora Digital

https://www.lahoradigital.com/carlos-miranda/autor/1931

 

    

El jueves 4 de julio hubo elecciones en el Reino Unido con un gobierno conservador y el viernes ya gobernaba el partido laborista. En un santiamén Rishi Sunak se despidió de Carlos III y este último pidió a Keir Starmer que fuese su nuevo primer ministro tras la holgada victoria laborista. Ese mismo viernes Starmer formó gobierno, se enteró de los secretos del Estado (códigos de disuasión nuclear incluidos) y ya durmió en Downing St.

Hace cinco años los conservadores ganaron claramente y ahora han sufrido su peor derrota en casi 200 años. Llevaban catorce desordenados en el poder con el Brexit de por medio y una sucesión de líderes poco convincentes. Además, los servicios públicos renquean y ha perdido el RU buena parte de su influencia mundial porque al marcharse de la UE perdió poder.

Es pronto para saber lo que va a hacer el nuevo gobierno laborista cuyo programa no era muy definido porque no tenía rival. No obstante, se pueden avistar algunas direcciones. Starmer es un moderado más cercano de la socialdemocracia de Blair que del podemismo de su predecesor al frente del partido, Corbyn. Las bolsas han subido con Starmer reivindicado un socialismo “business friendly”. Este gobierno laborista se acercará a la UE, pero no volverá. Tendrán que pasar décadas.

En este acercamiento tiene España intereses que defender, políticos, comerciales, económicos y relativos a la colonia de Gibraltar. Está pendiente un acuerdo que permitiría a los gibraltareños quedar cerca de Europa suprimiendo el paso de la verja y si el RU volviese un día a la UE, Madrid estará dentro del fortín y el británico fuera. Cuando España ingresó en la UE fue al revés.

En Francia también vemos un profundo cambio tras las elecciones del pasado domingo, pero en dirección diferente: populismos de izquierda y de derecha. Parecía que la extrema derecha tomaría el torreón, pero la bastilla resistió defendida por centristas, cierta derecha y las izquierdas del Nuevo Frente Popular. Queda por ver cómo va a seguir tres años más Macron, con qué gobierno y haciendo qué. Los sondeos se equivocan o será, quizás, que redirigen las intenciones del votante en función de los pronósticos que le ofrecen.

El Primer Ministro, Attal, quiso dimitir, pero Macron lo rechazó. Por ahora. No compartió Attal la decisión de convocar estas elecciones y hasta se puede apuntar la recuperación del macronismo en la segunda vuelta. El nuevo Gobierno deberá enfrentarse al separatismo islámico, a la inmigración ilegal, a una economía vacilante, a normas impopulares, pero económicamente apropiadas, a las problemáticas de Ucrania y Gaza, así como al futuro preocupante de la UE cercada por Putin, Xi y quizás a partir del año que viene por Trump. Francia debe retomar su necesario entendimiento con Alemania para avanzar en la integración de la UE sin escudarse en espejismos. Estará por ver en qué medida el NFP podrá mantener unida su variopinta composición que Macron intentará fracturar para no tener un gobierno que le imponga un programa de extrema izquierda que la UE no aprobaría. 

¿Fracasó Macron al convocar estas elecciones? Si quería parar a Le Pen, lo ha conseguido a pesar de su importante crecimiento. Sin embargo, no guardó sus espaldas por donde vino Mélenchon. Como a Macron le quedan efectivos y nadie tiene una mayoría absoluta, veremos como el Presidente francés peina un panorama complicado.

Mélenchon dijo la noche electoral que debe gobernar el NFP con su programa íntegro. Dos responsables socialistas se contradijeron. Uno, Faure, más cercano a Mélenchon, el otro, Glucksmann, más abierto a entenderse con Macron. Le Pen se refugió en que ganará más adelante y Bardella en una pretendida manipulación de los sondeos. En cuanto a Macron, guardó silencio. Prudente, pero sorprendente.

El resultado suscita preguntas. ¿Puede un sistema presidencialista reconvertirse en parlamentario con un gobierno de coalición? ¿Puede Macron entenderse con aquellos del NFP que no responden a Mélenchon? ¿Un gobierno técnico provisional hasta que puedan volver a convocarse elecciones dentro de un año? ¿Tendremos una Francia bloqueada? ¿Resolvieron algo estas elecciones?

Posiblemente sólo sean un preludio a la presidencial y legislativas de 2027 cuando extrema izquierda y extrema derecha intentarán de nuevo instalarse en los palacetes del Elíseo y Matignon. Los extremos de cada lado capitalizarán sobre los problemas no resueltos que ya les dan viento de cola y veremos quien toma el relevo de un centro moderado ya que Macron no podrá ya presentarse para un tercer mandato. “Suite au prochain numero” ...

En el RU el panorama se aclaró, en Francia, se ha complicado. También en EEUU donde Biden se tambalea acosado por influyentes que piden su renuncia temerosos de que esta vez Trump le gane a pesar de una buena presidencia.

En Europa se elevan más voces pidiendo un acuerdo para acabar la guerra en Ucrania. Rusia, que quiso controlarla entera, la ha perdido, pero podría quedarse con un 20 % del territorio ucraniano. Dará rabia a ucranianos y occidentales este peaje, pero puede compensar la derrota rusa y Ucrania podría prosperar enmarcada en el mundo occidental a pesar de las zancadillas de Putin.

 

Carlos Miranda, Embajador de España

 

 

 

 

 

 

 

sábado, 6 de julio de 2024

RADICALISMOS FRANCESES

RADICALISMOS FRANCESES


                    Madrid, 05-07-2024

                    (Lectura rápida 😊)  

         

También me publican en La Hora Digital

https://www.lahoradigital.com/carlos-miranda/autor/1931

 

   

Muchos especialistas señalan que el programa económico del Nuevo Frente Popular (NFP) de Jean-Luc Mélenchon es más radical que el del Reagrupamiento Nacional (RN) de Marine Le Pen. La economía de mercado peligraría más con la extrema izquierda y menos con la extrema derecha. Nada nuevo.

El NFP pretende una economía muy intervenida por el Estado. La libertad creativa del capitalismo y de sus emprendedores vería sus alas recortadas. El dirigismo estatal la acercaría a la sovietizada del pasado: un fracaso esperpéntico que provocó el hundimiento de la Unión Soviética.

Añadiendo unos impuestos diseñados para trasladar rápidamente la riqueza de los afortunados y exitosos a los pobres y desacertados se producirán, aseguran, sobrecostes empresariales, quiebras, mayor paro y fugas de capitales. Una economía en declive, menos para repartir y más pobreza para todos. Sabido.

Sin apoyar las medidas del RN, como la de volver a la jubilación a los 60 años, precisan que, incluso afectando negativamente al actual entramado socioeconómico, no lo pondrían en riesgo existencial o de gran desvirtuación. Muchos sociólogos piensan que el radicalismo del NFP, más cercano a la extrema izquierda que a la socialdemocracia, fomentará un mayor acomodo de la burguesía, la pequeña incluida, con la extrema derecha más que con la extrema izquierda. Tampoco una sorpresa.

Observadores de referencia consideran que una cohabitación entre Macron y Le Pen (vía Bardella, su casi imberbe delfín) sería más llevadera que con Mélenchon. No obstante, otras variantes culturales e ideológicas están también presentes en la ecuación que contiene asimismo la insatisfactoria convivencia entre el laicismo y el Islam, esencialmente con el de aquellos recalcitrantes a su integración en una sociedad occidental, así como otras percepciones correspondientes a la lucha de clases.

Resurge ahora la aspiración de un cordón sanitario con el RN tanto por motivos políticos como por el hecho de que si el RN lograse una mayoría absoluta el margen de maniobra del Presidente Macron se reduciría, sin perjuicio de que otras fórmulas también le limitarán. Un cordón que algunos consideran que victimiza y atrae voto hacia el RN. En todo caso, muchos electores votarán tapándose la nariz.

Queda por ver si las consignas de los partidos serán seguidas por los electores en la segunda vuelta del próximo 7 de julio y, posteriormente, como pactarán para formar un gobierno si nadie consigue una mayoría absoluta. El RN es la única formación que puede lograrla. El NFP llegará segundo a distancia y aún más retrasadas las fuerzas centristas.

Son los radicalismos los que llevan la voz cantante sumando juntos alrededor de un 65 %. El “Ensemble” de Macron anda por un 21 % y Los Republicanos con un 10 %. Cifras que se adecuarán circunscripción por circunscripción este domingo de San Fermín. Lo sensato sería que creciese lo situado entre los extremos. Veremos si sólo hay miuras.

En las elecciones británicas de este jueves el enfrentamiento fue clásico: esencialmente conservadores contra laboristas, ganando esta vez estos últimos holgadamente. Los peperos se identifican con los conservadores y los socialistas con los laboristas.

Más complicado en Francia. Los Republicanos, se dividieron entre macronistas y conservadores. Ahora estos últimos se vuelven a dividir entre conservadores y lepenistas. Feijóo dice identificarse con los conservadores. El partido socialista francés está colonizado por la extrema izquierda e inmerso en el NFP. Debería serle fácil a Sánchez, aliado con la extrema izquierda, los herederos de ETA y los separatistas, identificarse con el frente populismo. Sin embargo, nuestro timonel polariza aquí, pero en Europa pacta con el PP y los liberales y si deben acordar algo con la extrema derecha de Meloni para garantizar estabilidad, se enfangará con sus amigos europeos.

El socialista Hollande, Presidente anterior a Macron, se presenta en su feudo de la Corrèze. Nunca en la V República un antiguo Presidente intentó ser elegido después diputado. Consiguió en la primera vuelta un 37,6 % frente a la candidata de extrema derecha (30,9 %) y el de la derecha (28,6 %). ¿Podría ser Primer Ministro para encabezar una mayoría “diversa”, “plural” o “múltiple” (aislando a Le Pen y Mélenchon) si consigue el escaño? 

Lo que escasea es introspección para determinar por qué crecen los radicales (más los de extrema derecha) y decaen del centro izquierda al centro derecha.

 

Carlos Miranda, Embajador de España