CARIDAD PROPIA
San Juan de Luz, 13-08-2021
(Lectura
rápida 😊)
Biden
ha señalado que los afganos tendrán que
defenderse ellos mismos de los talibanes. No obstante, su ejército
es incapaz, el solo, de pararlos. A pesar de la ayuda y del apoyo estadounidense,
nunca ha estado en condiciones de controlar
militarmente su propio país. De ello se quejan los americanos que lo
han adoctrinado militarmente y entrenado, algo que también han hecho, en menor
medida, otros países que participaron en la operación de luchar contra el
terrorismo amparado por los talibanes y en el intento de democratizar una
sociedad poco preparada a ello.
Biden
ha dejado en evidencia que los EEUU se han
hartado de pelear por otros. Eso es posible cuando sus intereses lo
aconsejan, pero, asimismo, tiene un límite, como también les ha ocurrido a
otros, a Rusia, pe, en el mismo caso afgano.
Es
difícil no recordar el final de la guerra del Vietnam con un ejército de
Vietnam del Sur en desbandada tras el avance final de las tropas de la
comunista Hanoi. Tampoco fueron capaces los
militares del Vietnam sureño de valerse por sí mismos. Solo cabe
desear que cuando los talibanes conquisten Kabul no veamos de nuevo la
dramática evacuación de los últimos de Saigón desde la azotea de la Embajada
americana.
Una
lección, la de que hay un límite a la paciencia de Washington, que los europeos
debieran de considerar. La UE necesitaría una
defensa propia, pero a pesar de los pasos que se dan en esa
dirección, una defensa europea que ampare verdaderamente una autonomía estratégica
sigue siendo una utopía. Necesaria, pero utopía, porque sin un poder
centralizado, federal, poco se podrá hacer que sea verdaderamente relevante.
Afortunadamente, la OTAN es una realidad. Lo ha subrayado,
la ministra de Defensa, Robles, cuando, contestando a unas preguntas sobre la
defensa de Ceuta y Melilla, ha recordado nuestra pertenencia a la Alianza.
Formalmente estas dos ciudades no están en los límites indicados en su Tratado,
pero están pegadas a los mismos y España las amparará mejor siendo parte de
este.
Pero,
tanto si se pertenece a la Alianza como a la UE, hay
que hacer un esfuerzo en Defensa y
los europeos van, salvo excepciones, como caracoles. España presume de
participar en muchas operaciones si bien poco invertimos en nuestras FAS y los
medios que necesitan lo que, a la larga, hará incluso difícil participar en operación
alguna.
La
caridad bien entendida empieza por uno mismo. Eso nos recuerdan los americanos
ya desde la época de Clinton. Los europeos
prefieren ponerse tapones en los oídos y vivir de gorra bajo la protección
americana. Europa no es Afganistán, pero al Este tiene a un vecino
peligroso, retorcido y muy armado. Debe prevalecer la diplomacia, pero bien
dotada, detrás, de legiones visibles en el horizonte, como hacían, con éxito,
los romanos.
Lo
mismo respecto del Mediterráneo, cuyas orillas son inestables, así como el
Sahel y el centro de África. España ya consiguió
introducir un mayor interés por el viejo Mare Nostrum en el Concepto
Estratégico de la OTAN aprobado hace diez años en Lisboa. Ahora
tocará aprobar otro más al día en la Cumbre de Madrid, el año que viene, en el
que parece que puede prevalecer una visión de 360 grados, no limitada, pues,
esencialmente, al continente europeo.
Es un camino de doble filo
pues
los europeos no son tan globales como los EEUU, el aliado principal. El
Mediterráneo y Africa nos interesan pues afectan a nuestra seguridad tanto como
el Este de Europa. Habrá que medir bien esos 360
grados si bien desde la sede de
la Alianza en Bruselas, debido a la globalización, no se puede ya ver a Beijing
solo en postales turísticas. China, ahora, expandirá su influencia en
Afganistán. Tanto en Santa Cruz como en Castellana serán capaces,
conjuntamente, de esa medición.
En
la Cumbre madrileña se elegirá un nuevo Secretario General. Más bien, una Secretaria General. Parece que
se quiere poner por vez primera a una mujer a la cabeza de la OTAN (Miguel
Gonzalez en El País). Circularían los nombres de seis mujeres. Por ahora … Desde Solana ha habido cuatro Secretarios Generales:
un británico, un neerlandés, un danés y un noruego. Los países del Este
reclaman ahora protagonismo con tres antiguas Presidentas. Reino Unido, Italia
y Alemania tienen, asimismo, posibles candidatas. ¿Tendría
España una? Hacen falta conocimientos
estratégicos, experiencia política así como dominio del inglés y del
francés, los dos idiomas oficiales de la Alianza.
Carlos Miranda, Embajador de España